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Uso de dispositivos y Visión

El uso prolongado de dispositivos electrónicos, como teléfonos, tabletas, ordenadores y televisores, está cada vez más integrado en nuestra vida diaria. Sin embargo, el tiempo excesivo frente a las pantallas puede provocar una serie de problemas visuales, entre los que podemos encontrar el llamado Síndrome Visual Informático (SVI) o fatiga visual digital. Esto se debe principalmente a la demanda de enfoque en cerca constante, la exposición a la luz azul,  los hábitos posturales asociados y la falta de parpadeo.

Como hemos comentado, una excesiva exposición a aparatos electrónicos puede producir una serie de problemas asociados, entre los cuales podemos encontrar problemas visuales.


  1. Fatiga visual: 
    1. Sensación de cansancio o pesadez ocular después de usar dispositivos durante mucho tiempo.
    2. A menudo se acompaña de molestias oculares y dificultad para mantener el enfoque.
  3. Sequedad ocular:
    1. La frecuencia del parpadeo disminuye al mirar pantallas, lo que causa sequedad, irritación o sensación de arenilla en los ojos.
  5. Visión borrosa:
    1.  Ocurre al mirar la pantalla de cerca durante mucho tiempo o al cambiar el enfoque entre la pantalla y objetos a distancia.
  7. Dolor de cabeza:
    1. El esfuerzo visual prolongado puede desencadenar dolor de cabeza o cefaleas tensionales.
  9. Sensibilidad a la luz:
    1. La exposición prolongada a la luz azul puede aumentar la sensibilidad a las luces brillantes.
  11. Dificultad para enfocar:
    1. Problemas para ajustar el enfoque rápidamente de lejos a cerca y viceversa (espasmo acomodativo).
  13. Dolor en cuello y espalda:
    1.  Aunque no es un problema visual, la postura forzada al usar dispositivos puede influir negativamente en la visión al limitar la circulación sanguínea hacia los ojos.

Causas principales:

  • Fijación prolongada: Los ojos trabajan más al mantener el enfoque cercano durante largos períodos.
  • Parpadeo reducido: Al mirar pantallas, se reduce el parpadeo a la mitad de la frecuencia normal.
  • Postura inadecuada frente a la pantalla.

Prevención y cuidados

Regla 20-20-20: Cada 20 minutos, mira un objeto a 20 pies (6 metros) durante al menos 20 segundos para relajar los ojos.

  1. Lubricación ocular: Usa lágrimas artificiales para prevenir la sequedad.
  2. Ajusta la iluminación: Evita el reflejo directo en la pantalla y trabaja en un ambiente bien iluminado.
  3. Postura adecuada: Mantén la pantalla al nivel de los ojos y a una distancia mínima de 50 cm.
  4. Parpadeo consciente: Haz pausas para parpadear y lubricar naturalmente tus ojos.
  5. Lentes específicas para pantallas: Consulta a un optometrista para obtener lentes que reducen el esfuerzo visual.

¿Cuándo consultar a un optometrista?

Si experimentas síntomas persistentes como visión borrosa, dolores de cabeza frecuentes o molestias oculares que no mejoran con descanso y con buenos hábitos visuales, es importante acudir a un optometrista del desarrollo para poder realizar una evaluación completa de tu sistema visual y buscar la mejor solución bien con lentes, filtros o con terapia y/o rehabilitación visual.

El uso consciente de la tecnología y hábitos visuales saludables son clave para prevenir estos problemas y mantener una visión óptima.